Cuando trabajamos con las familias suele salir este tema de la
educación sexual y lo califican como uno de los más difíciles.
Aquí
compartimos una breve reflexión sobre esta educación y algunos
recursos que pueden servir de ayuda para abordarla en casa.
Muchos
padres y madres perciben la educación sexual de sus hijos e hijas
como algo que les resulta, cuando menos, incómodo de afrontar, por lo
que acaban dejándola de lado, confiando en que se encargue de ello la escuela y con eso sea suficiente.
Si
hablamos de lo que consideran que es la sexualidad y la educación
sexual, descubrimos que tienen creencias como que la sexualidad tiene que ver, sobre todo, con los órganos genitales, y que la educación consiste principalmente en tener una “conversación seria” con los hijos e
hijas cuando se aproxima la adolescencia.
Hay
que empezar cuestionando estas ideas y reflexionando sobre algo en lo
que no solemos reparar:
En la familia siempre hay alguna educación
sexual -con o sin intención- porque la educación
depende de lo que transmitimos con las actitudes y comportamientos
más que con las palabras.
Los padres y las madres son el modelo de
referencia principal de sus hijos e hijas, que no se pierden detalle desde sus primeros años; lo que mamá y papá dicen y lo que no dicen sobre la sexualidad, las
preguntas que contestan y las que ignoran, los gestos, las acciones,
las relaciones que tienen entre sí… son las primeras enseñanzas
que sus peques reciben y que van a condicionar de alguna manera la forma de vivir su propia sexualidad.
Una
educación sexual adecuada les ayuda a aceptarse, a respetarse y
respetar a las demás personas, a protegerse de los abusos; puede ser
un antídoto contra la violencia, además contribuye a la prevención de las Infecciones
de Transmisión Sexual, los embarazos no deseados, etc. Así que
¿cómo no va a implicarse la familia?
DOS
CLAVES
La educación sexual empieza en los primeros años. Es un proceso que no debemos dejar al azar en la familia, es necesario llevarlo a cabo de forma consciente, poniendo atención e intención para que sea lo más adecuado posible.
Hay
dos claves que facilitan este proceso: el
ejemplo y la confianza.
El
ejemplo, el "buen" ejemplo, en el caso de la educación sexual, tiene que ver con ser
personas respetuosas en palabras y gestos, capaces de expresar
ternura, cuidando de no transmitir estereotipos sexistas ni
prejuicios.
La
confianza se gana en la relación que se establece con los hijos e
hijas desde que nacen, significa crianza basada en el apego positivo,
que sientan que se les acepta, escucha y apoya, que se les acompaña
y orienta, significa buena comunicación para hablar con naturalidad
de cualquier tema, también de la sexualidad, de manera adecuada a su edad.
Dos
claves no parecen mucho ¿verdad?, pero en realidad suponen un
profundo trabajo personal, en primer lugar para clarificar nuestra
concepción sobre la sexualidad ¿cuáles son nuestras ideas y
valores?, una mirada sobre la educación sexual que hemos recibido,
lo que podemos mejorar…Al final es una oportunidad para aprender, para evolucionar
como personas y en nuestro papel educativo; recordemos que educar es también educarnos.
UN
RECURSO ÚTIL PARA EMPEZAR
Hoy
día tenemos al alcance recursos que pueden ayudarnos en la educación
sexual, como estos que os recomendamos. Son cinco vídeos dirigidos a
las familias, que forman parte del proyecto educativo "Sexualidades", de la
Consejería de Salud del Principado de Asturias.
Tratan
diversos contenidos según las edades de los niños y las niñas:
Episodio1: de 0 a 3 años
La
familia es la primera figura de apego y de referencia en la infancia…
Episodio2: de 3 a 6 años
La
educación sexual nos prepara para conocer nuestros cuerpos, para
saber valorarnos y querernos, para comunicarnos de una forma
positiva...
Episodio3: de 6 a 10 años
Establecer
relaciones basadas en la igualdad y los buenos tratos, y la educación
emocional son otras claves de la educación sexual…
Episodio4: de 10 a 13 años
La
a etapa adolescencia es una etapa clave de cambios a nivel físico,
pero también psicológico y social…
Episodio5: más de 13 años
La
educación sexual también nos permite tener claves para expresarnos
eróticamente de una forma satisfactoria y para poner en valor la
diversidad…
En estos vídeos la sexóloga María Rodríguez, expone contenidos fundamentales sobre la sexualidad y la educación sexual que pueden servirnos de guía a la hora de abordar ese proceso educativo en la familia.
Para profundizar en este tema, podéis participar en algún taller presencial. En Lena lo organizamos cuando se completa un grupo de personas interesadas en realizarlo. Además, en la Biblioteca municipal, en la sección del programa Educándomos, contamos con materiales que pueden resultar útiles, entre ellos, muchos de los títulos recomendados en los vídeos referidos.
No hace falta ser especialistas en sexualidad ni en educación sexual para educar a los hijos e hijas en este tema, basta con tener información básica, ofrecer buen ejemplo y cultivar esa buena relación educativa, basada en la confianza mutua, para acompañarles en su crecimiento.
Más información:
Astursalud:
Educación sexual en la familia
Sexualidades. Proyecto educativo.